Nuestro objetivo es que los ecosistemas de agua dulce y los regímenes de caudal en las cuencas de ríos claves proporcionen agua a las personas y a la naturaleza.
El agua dulce es el origen de la vida. Es lo que hace que la Tierra sea un planeta singular dentro del universo conocido. También es un recurso que está amenazado. Únicamente un 3 por ciento del agua del planeta es dulce y sólo cerca de un 1 por ciento es de fácil acceso para los seres humanos.
El doble impacto producido por el crecimiento de la población y el cambio climático significa que debemos ser innovadores y asumir nuestro compromiso en cuanto a la gestión y la conservación del agua.
WWF está trabajando para proteger los ecosistemas de agua dulce y mejorar el acceso, la eficiencia y la asignación del agua para las personas y el medio ambiente –un componente esencial para salvar la mayoría de los lugares y especies priorizados por WWF y reducir el impacto de la huella de la humanidad en el agua.
El trabajo que efectuamos para elaborar planes de gestión de agua, avalados por los usuarios del recurso, es una contribución importante para mantener la funcionalidad de las cuencas de agua y el acceso al agua dulce.
El enfoque de WWF es el de fortalecer las capacidades de los gobiernos, las comunidades, los negocios y las instituciones financieras internacionales para lograr ecosistemas de agua dulce que sean resilientes y productivos.
Para asegurar la conservación de recursos naturales, como el agua, WWF implementa iniciativas, junto a otros actores. Este es el caso de la Alianza entre Producción más Limpia y Sector Privado.
El programa “Alianza entre Producción más Limpia y Sector Privado” es financiado por el Departamento de Estado de los Estados Unidos y está siendo implementado por World Wildlife Fund (WWF), en consorcio con los Centros de Producción más Limpia de: El Salvador, Guatemala, Honduras y Panamá, a través del proyecto “Producción más Limpia en cuencas priorizadas del Triángulo Norte de Centroamérica y Panamá”.
LEER MÁS
La Compañía Coca-Cola (TCCC por sus siglas en inglés) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) establecieron una alianza a escala global, para contribuir a la conservación del agua dulce en sitios prioritarios.
En América Central, la alianza global enfocó su trabajo en la ecorregión del Sistema Arrecifal Mesoamericano (SAM) que incluye las cuencas caribeñas de cuatro países: México (Península de Yucatán), Belice, Guatemala (costa del Caribe) y Honduras (costas del Norte). Esta alianza contó con tres líneas de trabajo: conservación de agua dulce, cadena de valor y valoración de la naturaleza. En estas áreas se han alcanzado logros significativos que contribuyen a la conservación de cuencas que forman parte del Sistema Arrecifal Mesoamericano.
LEER MÁS
